8/18/08

Doctores no le pueden rehusar tratamiento a los homosexuales

Todo doctor, a la hora de graduarse, tiene que recitar el juramento hipócratico. Este juramento establece un compromiso del médico de actuar siempre en beneficio del ser humano, y no perjudicarlo. Pero recientemente, doctores se están rehusando a proveer servicio a personas, basandose en sus creencias religiosas. En Inglaterra, mujeres musulmanas se rehusan subirse las mangas para lavarse las manos pues va en contra de su religión. En Estados Unidos, doctores se rehusan recetar pastillas anticonceptivas a pesar que es ilegal su comportamiento. Estas posturas son una aberración a la vocación de la medicina y hoy podemos estar contentos que la corte suprema de California le ha prohibido a los doctores a negarle tratamiento a personas homosexuales reclamando que esto conflige con su religión.

En un fallo unánime, la corte le prohibió a los doctores negarle tratamiento a homosexuales y lesbianas por que va en contra de su religión argumentando que la ley del estado que prohibe la discriminación por orientación sexual se extiende a la profesión médica.

La jueza Joyce Kennard que dos doctores de fertilidad que rehusaron inseminar artificialmente a una lesbiana no tienen ni el derecho a la libertad de expresión ni una exención de la ley del estado, la cual impone "obligaciones antidisciminatorias sobre los negocios."

En la demanda, Guadalupe Benitez, 36, dijo que los doctores la trataron con drogas para la fertilidad y le instruyeron como inseminarse ella misma en su casa pues sus creencias le prohibian hacerlo ellos mismos.

Me pregunto si su religión también aprueba que estos le niegen a una mujer su derecho a ser una madre y el tener una familia.

Desde entonces, Benitez ha dado a luz a tres niños utilizando inseminación artificial.

Esto es sencillo, si tu religión interfiere con el oficio que deseas practicar, ¡PUES NO PRACTIQUES ESTE OFICIO! De lo contrario, tendremos que aceptar a doctores judios ortodoxos y musulmanes negandole tratamiento a las mujeres pues no las pueden tocar. O si son bomberos entonces tienen el derecho a no salvar una mujer que se esta quemando por la misma razón. Quizas deciden unirse a la Sociedad Americana para la Prevención de Maltrato de Animales, y se rehusan a entrar a una granja porque esta llena de cerdos, o langostas y jueyes.

¡Enhorabuena!

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