Si algo hay que admiro en George W. Bush, el peor presidente en la historia de los Estados Unidos, es el hecho que ha logrado que me interese en la política americana. Es tanto mi desprecio hacia su labor y personalidad que no puedo si no mirar con ansias el dia que los democratas tomen la presidencia y, espero, deshagan todo el revolú que este hombre ha hecho.
Lo interesante es que al igual que yo, los conservadores en los Estados Unidos estan pasando por lo mismo.
Conservadores sociales estan poniendose más precavidos sobre el envolvimiento de la iglesia en la política, uniendose a los moderados y los liberales en su intranquilidad sobre mezclar las lineas entre el púlpito y la caja de votación, encuentra un nuevo estudio.
50% de los conservadores piensan que la iglesia y otros lugares de alabanza deben permaneer fuera de temas políticos y sociales, un aumento de un 30% en 4 años, de acuerdo a una encuesta publicada por el Foro Pew sobre Religión y Vida Pública y el Centro de Investigación Pew para la Gente y la Prensa.
Entre los grupos que cambiaron considerablemente de querer ver las iglesias envueltas en la política: Estadounidenses menos educados, los que creen que el matrimonio entre personas del mismo sexo es un issue muy importante y lo que creen que los dos partidos son poco amistosos a la religión.
"En mi mente, esto deletrea frustración," dijo Andrew Kohut, presiente del Centro de Investigación Pew. "Pero de la misma manera, sabemos que esa misma gente no estan interesados en menos religiosidad en el discurso político. Casi universalmente quieren un presidente religioso."
"No es que no quieren a la religión fuera de la política, es que su frustración con la forma en que aparentan ir las cosas los lleva a decir, 'Bueno, quizas las iglesias deberian quitarse de esto.'"
Bush es un presidente que piensa que Dios le habla por las noches, que Dios le ordenó invadir Irak y ve la guerra como una misión cristiana para esparcir al cristianismo. Su política de educación sexual basada exclusivamente en la abstención es un fracaso total y los estados estan negando el obtener fondos federales para poder proveer educación sexual completa, incluyendo el uso de condones y anticonceptivos, dada la vasta evidencia de que la educación sexual basada en abstinencia nada más no funciona. También ha intentado cambiar el momento de la concepción para prevenir el uso de anticonceptivos y ahora quiere permitirle a los proveedores de salud el poder negarle servicio a personas por razones de "conciencia".
Es hora que saquemos a estos individuos de la Casa Blanca. Si estas en USA y tienes la capacidad de votar, te exhorto a que lo hagas. Ya yo estoy inscrito, ¿y tu?
Fuente: Huffington Post
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